Más de quinientas empresas admitidas en ley de insolvencia durante 2018
Bogotá, D.C., Enero 16 de 2019.- Entre enero y diciembre de 2018 la Superintendencia de Sociedades admitió a 519 compañías al proceso de insolvencia y reorganización empresarial en los términos de la Ley 1116 de 2006, con el propósito de proteger el crédito y salvaguardar las empresas como unidad de explotación económica y fuente de empleo. Esta cifra alcanza un volumen sin precedente en la historia empresarial de Colombia, rompiendo todas las expectativas y ratificando el hecho, hoy evidente, de las dificultades financieras que atraviesa el sector real de la economía. Lejos están los tiempos cuando en un año las sociedades comerciales admitidas al régimen del concordato preventivo potestativo, se contaban con una sola mano, o cuando anualmente ingresaban al procedimiento de reestructuración empresarial previsto en la ley 550 de 1999, unas pocas decenas de empresas. La contracción de la demanda interna, el contrabando, la pérdida del mercado venezolano, la caída de los precios del petróleo, y las restricciones de acceso al crédito, son algunas de las causas que han llevado a 2557 empresas a ser admitidas al régimen de insolvencia desde el año 2007. Estas compañías promueven un acuerdo entre la sociedad deudora y todos sus acreedores, para reorganizar sus pasivos y obligaciones de contenido patrimonial. A la fecha se adelantan 2493 procesos de reorganización en todo el país, de los cuales en la ciudad de Bogotá se llevan a cabo 1131. El Superintendente de Sociedades, Juan Pablo Liévano Vegalara, puso en marcha un contundente plan de choque con el fin de avanzar en los procesos de reorganización y liquidación empresarial que actualmente adelanta la entidad, buscando superar la ostensible mora en la admisión de las solicitudes, ya que la ley 1116 establece un término de tres días para la admisión de la solicitud de inicio del proceso de reorganización, mientras que en el año 2018, las solicitudes enfrentaron una injustificable morosidad de más de 6 meses en muchos casos. Con este plan de choque, explicó el Superintendente Liévano Vegalara, se busca resolver, de forma más expedita, las solicitudes hechas por las sociedades de diferentes regiones del país en pro de la conservación de la empresa, siempre bajo el criterio de agregación de valor. Según cifras de la Delegatura de Procedimientos de Insolvencia de la Superintendencia de Sociedades, a la finales de noviembre de 2018, sólo en Bogotá, se estudiaban 238 solicitudes de sociedades que pidieron ser admitidas al proceso de reorganización empresarial y de 22 que buscan acogerse a la figura de liquidación judicial. En las intendencias regionales de Barranquilla, Bucaramanga, Cartagena, Cali, Medellín y Manizales, a esa fecha, se estudiaban 87 solicitudes de las cuales 69 son de reorganización y 18 de liquidación.
El Superintendente de Sociedades, Juan Pablo Liévano, indicó que cuando estas compañías firmen los acuerdos, se cumplirá con una de las estrategias fijadas por la actual administración denominada más empresa más empleo. “Con la implementación de modelos internos y fichas de trabajo avanzamos de forma más expedita en los trámites que realizan las empresas que buscan normalizar sus relaciones comerciales y crediticias, mediante su reestructuración operacional, administrativa y de activos y pasivos” señaló el nuevo Superintendente de Sociedades. Hay que recordar que el proceso de reorganización que adelantan las diversas empresas, bajo el concurso de la Superintendencia de Sociedades, busca preservar empresas viables y normalizar sus relaciones comerciales y crediticias, mediante su reestructuración operacional, administrativa, de activos o pasivos, aumentando cada año el número de empresas admitidas.
El director del bufete jurídico, ABOGADOS CORPORATIVOS, el abogado comercialista y experto en recuperación empresarial, Óscar González Arana, manifestó que: “Es necesario apoyar todos los esfuerzos del nuevo Superintendente de Sociedades para adelantar este oportuno plan de choque, ya que su éxito es indispensable para la protección del sistema mercantil, en especial para los empresarios involucrados en situaciones de crisis. El continuo crecimiento del número de empresas en ley de insolvencia debe convocar la atención del Estado colombiano, los gremios económicos y de todos los actores del universo económico.” En las cifras oficiales, conviene tener en cuenta el número de empresas cuya solicitud de admisión fue rechazada, ya que en 2018 fue igualmente muy alta, señaló Óscar González Arana Con base en la información disponible, todo parece indicar que, durante el presente año, continuará el alto volumen de empresas haciendo fila para ser admitidas a la protección del régimen de insolvencia y así poder lograr un acuerdo con sus acreedores. (Fuente: Superintendencia de Sociedades, noviembre 2018)
